1950 aprox.

El grupo de niñas son protagonistas de ese lugar que acaban de conquistar, la plaza del Planillo. Lugar privilegiado de tantos y tantos juegos, testigos bulliciosos de ese crecimiento vital. Allí todas las generaciones de Villamayor han jugado.

Enmarcando la escena la desaparecida, y no recuperada, puerta en arco de la casa lugar y la antigua tienda de ultramarinos de Julio Santabárbara.